viernes, 30 de octubre de 2009

La primera vez

Se llama Jim. Tiene 18 años, casi tres más que yo. Ha llegado como lector de inglés al instituto en el que estoy estudiando y me parece guapo desde el primer momento en que le miro. Su pelo es casi rojo, un color tan parecido al rojo que siempre me ha movido por dentro... La primera noche en la que coincidimos en la calle empezamos a hablar. Me mira como ya hace tiempo que sé que hay hombres que me miran. Le miro como hace tiempo que he empezado a mirar a algunos hombres.
Jim es escocés. Es pausado. Es educado. Es divertido y es tímido. Ha vivido ya donde yo hubiese querido ir. Es fascinante cuando habla. Entiende la pasión que le transmito cuando le cuento qué espero de la vida. Y es distinto. No se parece a los otros que se acercan. Es interesante, no le falta de qué hablar, no duda en qué contar.
Y no duda en invitarme a su casa. Y no dudo en ir con él. Antes paso por mi casa a contar a mi madre que voy a dormir a casa de una amiga. El me acompaña, y me deja helada cuando entra y habla con mi madre, cuando le habla de literatura.
Ella, mi madre, acepta la mentira de la noche con la amiga. Calla y me deja ir.
Me voy con Jim. Y es esa primera vez.
Jim es suave. Es delicado. Y es divertido. Hace que me ría y que me mantenga muy cerca de su cuerpo desde el principio. Me habla bajito. Me susurra en inglés. Me toca con mano delicada que no tiene prisa. Al final nos reímos ... No cierro los ojos, le miro porque me gusta verle.

¿Nos cuentas qué tal te fue?

9 comentarios:

Ghibli dijo...

Ni el Saramago más inspirado podría "adornar" la narración de mi historia. Me la salto, querida Carmen. Espero que usted lo entienda y no me lo tenga en cuenta...

EvitaBlu dijo...

Se llamaba Mario, robábamos ciruelas verdes y escapábamos en bibicleta. Ibamos al cine los domingos a la primera sesión de la tarde, él con americana de cuadros, yo con abrigo de cheviot.
Sólo nos dimos un beso, murió poco después. Fué especial, nunca le olvido.

Besos querida.

atikus dijo...

Que historias tan bonitas, la mia fue muy aburrida así que no la cuento..tengo otras mucho mas interesantes pero es que no estoy con ganas ;(

besitos

Manuel Pozo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
nancicomansi dijo...

La mia fué triste...que quieres que te diga...
YO estaba más más pendiente del "factor sorpresa", curiosa, deseosa de "saber", y él, desde luego más experimentado, de sofocar un deseo maquinal...
No tengo un especial cariño a la primera vez...
Las posteriores le dieron mil vueltas en pasión y deseo.

Besotes!

carrascus dijo...

La primera vez fue pensada, premeditada y buscada. Fue en 1.974, los dos teníamos 17 años y "ella" trabajaba en un taller de confección instalado en un bloque de pisos rehabilitado del centro de Sevilla.

Solo eran tres chicas las que trabajaban allí, y supongo que pasarían las horas de trabajo charlando de todas sus cosas. La "jefa" supo así que "ella" aún no había podido montárselo conmigo porque no teníamos donde hacerlo. Recordad que estábamos en 1.974.

Y le dijo que no veía ningún problema, que "ella" tenía las llaves del taller y nos podíamos ir allí todos los sábados y domingos que quisiésemos.

Así que la primera vez se consumó revolcados sobre un enorme montón de prendas y retales que había en un salón detrás de donde ellas cosían.

Recuerdo la curiosidad, la ternura, el temor, el deseo, la torpeza, la alegría, el amor...

Y aún tiemblo cuando pienso en la posibilidad de que entre todo aquel amasijo de tela pudiesen haber quedado olvidadas algunas agujas...

Pero no. Repetimos muchas veces y nunca apareció ninguna.

a-escena dijo...

La primera vez?. Prefiero olvidarla. La última, casi también.
Besos guapa.

Carmen dijo...

Ghibli... está bien... no nos cuentes y no será tenido en cuenta. Pero con la condición de que sigas volviendo por aquí ;)
Besosssss

Eva, qué bonito y qué triste. Nunca le olvides, no, nunca. Besos cariñosos.

Atikus, cuenta, cuenta, cuentaaaaaaaa

Nanci, hay demasiadas veces en las que ellos estuvieron demasiado pendientes de ellos... Y, sí, menos mal que las posteriores fueron muchiiiismo mejor!

Carrascus... parece sacada la escena de una película... incluso diría que italiana! Qué suerte de jefa! Tampoco la olvides a ella.
Besos con costuras.

a-escena... pues recuerda las que te gusten, que seguro que las tienes a mogollón! Besos con memoria.

Armenteros dijo...

Se hicieron muy buenos amigos. Un buen día ella le contó que estaba sufriendo porque el chico del que estaba enamorada no le hacía caso. Él le dejó su hombro para que llorase. Es el destino de los amigos, no termina en escenas escabrosas.
Besitos